"Tú eres el bien, todo bien, sumo bien..." repetía una y otra vez estos días en cálida melodía dejándolo impreso en cuanto tocaba, buscando también que en mi alma quedara esculpido como si sobre una roca se tratara.
"Loado seas mi Señor, porque eres un DON para mí", 50 años atrás escribía. El espíritu de Francisco se coló en mí para llenarlo todo de vida: De libertad en el amor, de riqueza en la pobreza, de perfecta alegría...
Eres todo bien, mi Señor, Has sido mi bien sorprendiéndome cada "mañana con tu misericordia y con tu fidelidad cada noche". 50 años y más en los que he sentido tu presencia en mí, la infinita gratuidad de tu amor en mí, tu vida plena en mí.
Tú en mis momentos de gozo, Tú en mi experiencia de dolor y oscuridad, Tú fortaleza y seguridad de mis pasos, Tú en tantos rostros queridos, cercanos, amigos que pusiste en mi camino, en todo y siempre...Tú.
Fue bonito celebrar este día en el que palpo el derroche de tu gracia haciendo rebosar mi alma, día para agradecer tanto don... día para recordar tu paso en mi historia: Familia, hermanas de comunidad, alumnos y padres, profesores, amigos...
50 años y ofreciéndote de nuevo lo que soy: capacidades, ilusiones y fracasos, búsquedas, pobreza y cansancio... hazlo todo nuevo en Ti para que cada día Tú seas más en mí. GRACIAS MI SEÑOR.
M..J. Valladares
Madrid 1974/O Barco de Valdeorras 2024